Tucson es una ciudad con efervescente cultura, gran gastronomía y eventos de todo tipo, pero, definitivamente si visitas la ciudad en verano debes reservar un buen par de días para conocer sus parques nacionales.

La ciudad de Tucson tiene una ubicación privilegiada al estar rodeada de parques nacionales y bosques que ofrecen una amplia gama de atracciones para todos los tipos de viajero: desde la satisfactoria contemplación de la flora y fauna desérticas, asombrosos atardeceres y los enigmáticos cielos nocturnos; senderos para realizar actividades físicas al aire libre; hasta actividades más especializadas como visitar un observatorio.

Los meses de junio y julio en la región son muy calurosos con noches muy agradables para disfrutar a la intemperie. Particularmente julio suele ser el mes con más lluvias, lo que se traduce en escurrimiento de ríos y arroyos que te permiten apreciar la cara más divertida del verano. Por ejemplo en Coronado National Forest se encuentra Seven Falls, una serie de pequeñas cascadas que son un verdadero espectáculo veraniego. El acceso a este sitio es por el área recreacional de Sabino Canyon, sendereando 13 kilómetros a través de Bear Canyon Trail. A pesar de que se considera un sendero de intensidad moderada, la recomendación es comenzar el recorrido muy temprano y llevar siempre agua suficiente para mantenerse hidratado.

Con más de 200 días de cielos despejados, los parques que rodean a la ciudad son excelente opción para realizar actividades al aire libre, entre las más populares están el senderismo, ciclismo, observar aves, incluso, practicar escalada para los más aventureros. Saguaro National Park con sus dos distritos a ambos lados de Tucson te ofrece infinidad de posibilidades para realizarlas todas.

En el distrito Este de Saguaro National Park, también conocido como Rincon Mountain District se encuentra el Área Silvestre, se trata de un área protegida de casi 100 mil acres que te ofrece un pacífico encuentro con la naturaleza, yendo del paisaje desértico lleno de cactáceas al bosque de coníferas, conforme te internas en la altura de las montañas. El Área Silvestre comprende seis campamentos a los que sólo es posible acceder caminando una distancia entre 6 y 16 kilómetros de sus respectivos senderos y zonas de aparcar. Los campamentos se encuentran entre los 157 y los 259 metros de altura, ofreciendo por ello diferentes ambientes y experiencias.

Una de las atracciones emblemáticas de Tucson yace también en el distrito Este de Saguaro Natinal Park, nos referimos a Mount Lemmon, que alcanza los 2 mil 791 metros de altura y que debido a su localización se considera dentro de la clasificación de “islas del cielo”, es decir, montañas rodeadas por tierras bajas que poseen climas completamente diferentes a la región que las rodea. El trayecto de 40 kilómetros para llegar a Mount Lemmon es el equivalente biológico de ir del Desierto de Sonora a los bosques de Canadá.

“El Monte Limón” es un atractivo de verano debido a sus temperaturas perceptiblemente más frescas que la región de Tucson. Si las impresionantes vistas y una de las mejores vías para el ciclismo no fuesen suficientes, Mount Lemmon te ofrece la experiencia de alcanzar las estrellas, pues puedes visitar Steward Observatory, que permite a sus visitantes observar los cuerpos celestes de forma privilegiada gracias a la altura, el despejado cielo desértico y la escasa contaminación lumínica. El observatorio ofrece acceso a dos de los telescopios más grades abiertos al público en el Suroeste de los Estados Unidos, se trata de un Schulman de 32 pulgadas y un Phillips de 24.

Como puedes apreciar, los parques nacionales ofrecen un amplio abanico de actividades y emoción para disfrutar del verano en Tucson. Arma tu itinerario, haz todas tus reservaciones y prepárate para vivir el verano más emocionante de tu vida.